lunes, 18 de julio de 2011

Otro PER educativo. ¡Y otra de gambas!


El todavía presidente de la Arrejunta de Andalucía repartirá 3000 becas de 400 euros mensuales para jóvenes que tengan entre 18 y 24 años, con cargas famliiares y en el paro. La idea es que puedan "retornar a la enseñanza reglada" y completar las titulaciones obligatorias o post-obligatorias que dejaron inacabadas. O sea, que les paguemos una segunda oportunidad. 
En este sentido, la Consejera de (la) Presidencia, Mar Moreno, espetó que dicha iniciativa es ejemplo del "Debate sobre el Estado de la Comunidad de acción y respuesta" -¡toma gramática!- que abordará el presidente andaluz. Y añadió, sin sonrojarse, que estas propuestas de Griñán "no van a dejar indiferente a nadie porque se va a mojar, y mucho", para ofrecer soluciones a los problemas de los andaluces. Defiende la consejera que el boom de la construcción sedujo a muchos cráneos privilegiados y les alentó para cambiar el diccionario de Latín y las fracciones algebraicas por el palaústre y la cementera. ¿Conclusión? Que miles de jóvenes, "con la crisis, se encuentran ahora fuera del mercado laboral y del sistema educativo". ¡Ale hop! ¡Taratachín-tachán! Y así explicamos por qué razón Andalucía tiene una elevada tasa de abandono escolar y una ratio estratosférica de analfabetos en paro. ¡Con dos cojones!
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Hasta aquí, el relato frío y desapasionado del delito. Pero vayamos por partes. Cualquiera que haya padecido cualquier tipo de estudios de carácter público en Sociatia, ya sea como educador o como educando, conoce algunas realidades confirmadas por los hechos. Sin paciencia para ser exhaustivos sabemos que:
  • Para suspender la actual ESO, el Bachillerato o la Selectividad, tienen que darse dos condiciones no excluyentes: que el alumno sea muy, pero que muy muy torpe y que viva como un zángano.

  • Para abandonar los estudios de un colegio o de un instituto tienen que darse otras dos condiciones: que el alumno esté muy desfasado en cuanto a curso y edad, con la consiguiente vergüenza, o que prefiera amargar la vida de sus padres antes que la de  los demás alumnos y profesores, quienes suelen defenderse organizados.
  • Antes de salir del sistema público de adoctrinamiento, al desertor se le ofrecieron con insistencia múltiples oportunidades: pudo pasar de curso con 22 asignaturas pendientes, recibir clases de apoyo casi personalizadas, ser matriculado en un curso de alumnos “con dificultades”, haber optado por un antiguo Programa de Garantía Social, un Programa de Diversificación o un Programa de Cualificación Profesional Inicial; todos ellos atajos seguros hacia el éxito. También dispuso, obviamente, de la posibilidad de graduarse en la Enseñanza Secundaria de Adultos. Incluso pudo reclamar ante la inspección educativa, con grandes garantías de aparecer en una orla, que le regalasen el graduado porque sus profesores no fueron lo bastante guays y no se apuntaron al Plan de Calidad.  Es decir, renunciaron a 7000 euros por regalar aprobados.
 
  • A estos alumnos vagos, consentidos y, regularmente faltones, agotar 14 años del presupuesto público y de sus vidas sin alcanzar lo menos que se despacha en títulos -  la dichosa ESO, el segundo título oficial tras  la partida de nacimiento – se les han concedido becas renovables sin reparar en que no aprobaban nada nunca, no acudían al centro casi jamás y, cuando se dignaban a aparecer, entorpecían el trabajo de todo el mundo siempre. El único requisito para cobrar era que sus padres pudiesen camuflar sus ingresos sin importar la idiocia supina de sus vástagos.  
    • Para evitar que nadie perdiese la oportunidad de estudiar por carencias económicas, el gobierno arrejuntista se apropió de la propiedad de los libros y los prestó –un mismo libro para cuatro alumnos consecutivos durante cuatro años seguidos-  a condición de que los devolviesen sin subrayar y sin tapar con pegatinas de Ronaldo el escudito de la Junta. Por si fuera poco, también  se han derrochado miles de euros en centros TIC y en ordenadores portátiles para que los más burros, entre chat y peli porno, consiguieran perfeccionar en el Word sus faltas de ortografía.
    • Añadamos que la presión legislativa, corporativa, directiva, política y familiar para aprobar por la jeta a los alumnos ha sido tan grande y tan continua que los profesores ya sólo nos atrevemos a suspender  a delincuentes confesos, sociópatas “con papeles” y frikis sin reconocimiento  social. O sea, que te puedes cargar a un friki siempre que no haya aparecido en el programa de Juan y Medio.   
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      • Por último, diré que quien haya salido voluntariamente del paraíso educativo en la última década ha sido porque... no soportaba cumplir normas, no resistía abrir un libro, no aguantaba no ser evaluado por su madre, ya se había comprado con las becas una moto, ya había vendido en el mercado negro su ordenador, ya había logrado deprimir a medio claustro de profesores, ya había adelantado la jubilación  voluntaria de varios tutores mártires, ya había suspendido varias veces la competencia para hacer la o con un canuto y ya había conseguido apropiarse en casa del sofá, la cartera y el mando del plasma. Si no, no se entiende tanto abandono... con lo bien que se tiene que vivir mientras te consienten que vegetes como un señorito malcriado y exigente. Puedo asegurar que en 15 años de ejercicio profesional nunca conocí a un estudiante, digno de tal nombre, que dejase a medias su vida académica para ponerse a trabajar. Además, ¿trabajar? ¿Dónde? 
       



      Una vez recordadas algunas verdades de Pero Grullo, la única razón que se me ocurre para justificar estas medidas de-dinero-para–todos-a-costa-de-los de-siempre es bien sencilla: todos estos beneficiarios de las becas, analfabetos ni siquiera funcionales,  alérgicos al conocimiento y al esfuerzo , tienen edad para votar. Para votar al PSOE, claro. El partido de las clases despiojadas y agradecidas. 


      Er partío der pueblo. Un pueblo que no sabrá leer, ni encender una televisión en la que no salgan Paquirrín o la Esteban.  No sabrá que le están endeudando para tres generaciones. No sabrá que está pagando en oro su dignidad y enterrando en estiércol su futuro. Pero que sabe -porque Canal Sur se lo recuerda- que hay que pensar con la panza semillena y dejarse de palabritas finas y exigencia de responsabilidades, de madurez democrática o de simple dignidad personal. Además, ¡qué coño!, si los profesores no tuviesen tantas vacaciones, estos ninis de segunda generación no estarían en el paro y habrían aprendido algo útil de verdad. No tendrían cargas familiares porque, entre otras cosas, habrían aprendido a leer las instrucciones de una caja de condones. Por ejemplo.

      4 comentarios:

      Viernes dijo...

      Es otro intento para que reconsideremos la idea de darles el aprobado general. ¿Los aprobáis ahora que estáis a tiempo o en un futuro no muy lejano? La única diferencia es: ¿nos costará el dinero o no?

      Anónimo dijo...

      Lola, simpática, estudiosa y educada se enamoró de Iñaki, absentista, gamberro, guapo y dicharachero que merodeaba el instituto sin haber completado la ESO. Embarazada, se casó…, y como buena madre se dedicó a sus obligaciones domésticas, especialmente al cuidado de su hijo. Como podemos imaginar duró poco el idilio y sí sus consecuencias. Iñaki encontró una lolita nueva y en su coche 4x4 desapareció con ella.“Dicen que anda por Madrid o Barcelona…” decía ella si se le preguntaba. Lola reinició sus estudios en el INBAD y los continuó en la UNED al tener que compaginarlos con las cargas familiares y su trabajo nocturno de cuidadora de personas mayores, a tres euros la hora. Ahora es licenciada en inglés y recorre la ciudad en moto dando clases particulares a domicilio. Aunque gana algo más, se lamenta de no tener tiempo para preparar las oposiciones, su aspiración última.
      ¿Tendrá Lola derecho a una de estas becas o, como me temo, estarán dirigidas solamente a las lolitas y los iñakis?

      elhijodelbarbero dijo...

      Me temo, amigo Anónimo, que pensando mal aciertas. La pobre Lola, en cambio, sólo obtendrá el rencor social de quienes no soportan que, a pesar de todo, estudiara. "Siempre se dio muchos aires. Pero, simplemente, ha tenido suerte en la vida. Que me den el dinero a mí, que dejé los estudios para trabajar en el Telepizza y soy padre de otros dos niños... ¡Y un piso, joer! Además, estas tías les quitan el trabajo a los hombres." Esto, más o menos, dirá el Ikaki caminito de la urna.

      yelowsubmarine dijo...

      Las Lolas no existen actualmente y al Iñaki debió de haberle evaluado su señor padre.-me repatean las adoradoras de malotes sean niñas, jóvenes o adultas, tanto o más que ellos-.

      Me gusta este comienzo de blog por la gracia literaria y el cabreo que destila , más que nada, el cual comparto, aunque ni nosotros, ni mucho menos el "cambio de gobierno" , vayamos a componer lo descompuesto.

      Enhorabuena Profesor Crusoe.